Equipos portátiles e instalaciones automáticas de termografía activa para control de materiales compuestos.
El principio básico de la termografía activa es que el flujo inducido de energía desde la superficie de un objeto se ve afectado por defectos internos como vacíos, delaminaciones, orientación de fibras. Estos defectos aparecen como contrastes térmicos en la superficie del objeto inspeccionado por lo que pueden verse fácilmente mediante cámara termográfica. Deben analizarse mediante un software basado en potentes algoritmos que permitan poder identificarlos sin problemas. Es una técnica rápida y sin contacto.
Sectores
AUTOMOCIÓN
Control de glue band
Control de piezas de fibra de carbono
AERONÁUTICA
Control de composites.
NAVAL
Control de corrosión
Control de defectos en fibra de vidrio
DEPORTIVO
Inspección de material deportivo como cuadros de bici, tablas de surf, snowboards…