Ambas tecnologías se utilizan para detectar defectos superficiales en las piezas a verificar. Estos puede ser grietas, poros, delaminaciones, o cualquier otro defecto que visualmente no se pueda detectar, pero que puede generar un defecto prematuro en la pieza durante la vida útil de esta. Las partículas magnéticas y los líquidos penetrantes, dan indicaciones del posicionamiento de los defectos, pero por el contrario no indican cuál es la situación de la pieza bajo la superficie.
La tecnología de los líquidos penetrantes se utiliza para la detección de defectos superficiales abiertos. Consisten en la aplicación de varios productos sobre la pieza a verificar en un orden y con unos tiempos establecidos por norma o por las especificaciones del cliente para tener indicaciones visibles de los defectos.
Karl Deutsch